Hace tres años, decidí crear mi propio espacio dedicado a la maderoterapia personalizada para mujeres. No fue un camino fácil. Como muchas emprendedoras, tuve que combinar la pasión por mi trabajo con el esfuerzo diario de construir un negocio desde cero. Mi madre, una mujer emprendedora y luchadora, ha sido mi mayor inspiración. Desde pequeña, la vi enfrentar desafíos y salir adelante con determinación, y esa fuerza es la que me impulsa día a día.

En mi centro, me di cuenta de que los productos que ofrecía no cubrían por completo las necesidades específicas de mis clientas. Carrera Cosmética nació de esa frustración, pero también de mi compromiso con ofrecer una solución real y eficaz. No soy solo la creadora de una marca; soy una mujer que entiende el valor del esfuerzo, del sacrificio y del cuidado integral. Cada fórmula que desarrollo está pensada para la mujer de hoy: una mujer que se enfrenta a múltiples roles, que lidera su vida con determinación, pero que también busca momentos de conexión profunda consigo misma.