En busca de ese camino a la felicidad y crecimiento personal. Decidí abrir una tienda de accesorios para mascotas en Sevilla, junto a mi marido, que es mi gran apoyo.

Pero aún así sentía que me faltaba algo, pero no sabía todavía el qué.

Soy una persona muy inquieta, siempre estoy inventando alguna cosa. Hasta que un día, cogí en mis manos un collar Martingale y pensé esto puedo hacerlo yo, y cosas de la vida que esa misma semana una amiga me dijo oye están a la venta las máquinas de coser del Lidl con lo buenas que son. Me hice con una, y decidí usarla para hacer el primer collar Martingale.

Me costó mucho sacar los patrones, medidas, y encontrar la forma más eficaz de coserlos. Pero con mucho amor y paciencia lo logré.

Expusimos los collares en nuestra tienda, y tal fue el éxito que empecé a hacer más y más, empezamos a vender a tiendas por toda España.